Por Tomás Valle
Hay dos temas que preocupan a Joan Laporta en este mercado de pases, la continuidad de Lionel Messi en Barcelona y la renovación del contrato de Ilaix Moriba. Ambas situaciones siguen sin resolverse y mantienen en vilo a la afición catalana, ya que se trata de su máximo ídolo y su mejor proyecto.
En cuanto al argentino lo único que restaría para que se confirme su renovación sería que el club consiga liberar el espacio salarial necesario para que el contrato no rompa las reglas de fair play financiero. Muy distinto a lo que sucede con el joven centrocampista, con quien no logran llegar a un acuerdo económico.
La dilatación para llegar a un acuerdo estaría llevando las negociaciones a un punto de tensión máxima. Al nivel de que el presidente del conjunto catalán le comunicaría al representante del jugador que si no aceptan la última propuesta que hará el club lo mandarían a entrenar con el segundo equipo, según informa depor.com.
Habrá que ver que ocurriría en el caso de que suceda eso, ya que tener a Moriba entrenando diferenciado podría costarle varios millones de euros a la institución culé. El valor de la ficha del español actualmente ronda los 50 millones de euros, pero si pierde importancia en el primer equipo su valor podría irse por el suelo o incluso irse cuando acabe su contrato de manera gratuita.
En el caso de que sucediera eso, significaría una muy mala noticia para Barcelona, ya que se perdería la oportunidad de disfrutar a uno de los mejores mediocampistas del futuro y, al mismo tiempo desperdiciaría una oportunidad única de generar un ingreso millonario, que le permitiría cancelar una buena parte de la deuda que dejó Josep María Bartomeu.
23/04/2024
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