Le costó 150 millones al Barza, demostró ser un tronco y ahora jugará la final de la Copa del Mundo

El francés Antoine Griezmann llegó al Barcelona en junio del 2019 procedente del Atlético Madrid y todos pensaban que sería en gran acompañante y socio de Leo Messi en el ataque del FC Barcelona. El cuadro catalán pagó un monto de 150 millones de euros por un jugador que era campeón del mundo con Francia y que era el mejor del cuadro colchonero de la mano de Diego Simeone. 

Es más Antoine llegó a dos finales de la UEFA Champions League con cuadro colchonero ante el Real Madrid, en ambas oportunidades cayó a manos del cuadro blanco sin embargo, ya desde ese momento se podía apreciar que el volante sería un verdadero crack, sin más descripciones, por estas cosas el Barcelona lo adquirió a un precio de locos.

Más noticias sobre el Barcelona:

Conoce las verdaderas causas por las que Bellerín no saldrá del Barza a pesar de seguir comiendo banca

Vale 40 millones de euros, lo llaman el nuevo Halaand y el Barza podría cometer un error al contratarlo

Pero todo cambio como dice la canción del grupo musical ‘’Camilla'' ya que en su llegada al Barza no pudo demostrar o justificar su valor por el cual el cuadro catalán lo compró. Y no fue porque no jugó, de la mano de Valverde, Setien y Koeman tuvo muchos minutos pero lamentablemente también la presencia de Messi opacaba su desempeño. Desde aquel tiempo ya pasaron algunos años y hoy Griesmann en el Atlético de Madrid se está reencontrando con su juego y como Deschamps confía en él, lo llamó para la copa del mundo y no se equivocó. Francia derrotó a Marruecos por las semifinales de Qatar por 2 tantos a 0 y jugará la final frente a la Argentina de Lionel Messi.

Griesmann  pieza fundamental en Le Blue:

Antoine es fundamental en el equipo galo y su participación no es discutido en el 11 inicial de Didier Deschamps. El volante no solo es fundamental porque tiene buen panorama de juego sino también porque a la hora de recogerse para colaborar en defensa es el primero en colaborar. Estas cosas tiene el fútbol, un día llegas fichado por una millonada y no rindes y después cuando nadie confía en ti logras tapar bocas, como lo hizo Griesmann esta tarde con el Barza.