Por Tomás Valle

Emmanuel Petit es una de las máximas figuras de la historia del fútbol francés, campeón del Mundial de 1998, marcando un gol en la final, y uno de los ídolos mas grandes del Arsenal de Inlgaterra. Dueño de una extensa y magnífica carrera, solo se arrepiente de una cosa, de haber jugado en Barcelona.
El centrocampista llegó al equipo catalán a principios de la década a cambio de una fortuna pero nunca pudo demostrar todo su potencial. Peleado con la mayoría del plantel y sin la continuidad deseada, se terminó yendo del club un año después.
Años mas tarde, en distintas declaraciones aseguraría que “el Barcelona estaba podrido por clanes, sufrí racismo por parte de algunos jugadores y varias veces en mas de una ocasión”, dejando fuertes palabras para sus ex compañeros, entre los que se encontraban Josep Guardiola y Patrick Kluivert.
Petit dijo en mas de una ocasión que su paso por Barcelona fue lo peor que lo ocurrió en su carrera y nunca tuvo tapujos en decirlo. Sin dudas una de esas historias en las que un excelente jugador no logra encajar en una magnífica institución, simplemente no eran el uno para el otro.

13/05/2025

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