La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) les ha puesto un ultimátum a las jugadoras campeonas del mundo en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023: está claro que por mucha razón que tengan no las esperarán por siempre. Tras la renuncia de Luis Rubiales, las jugadoras plantearon una serie de exigencias y más renuncias, pero no han sido escuchadas.
Sucede que se avecina el debut de la selección de España ante Suecia por la Nations League, el cual será este viernes desde las 18.30 (hora de España). ¡Y por el momento no hay jugadoras disponibles para ser convocadas por Montsé Tome! En realidad, las hay: pero 21 campeonas del mundo más otra veintena de grandes futbolistas han decidido renunciar y esto atenta directamente contra las aspiraciones de la selección de España, actual campeona del mundo, que en la Nations League se disputará su pasaje a los Juegos Olímpicos de París 2024.
Según ha revelado Onda Cero, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) habría dado a las jugadoras margen “hasta las 00h de este lunes para dar una respuesta”, aunque las negociaciones continuarán también durante toda la jornada. Es que de manera urgente debe salir una convocatoria y España tiene que salir a la cancha. En caso de que durante este lunes no haya respuesta, la mediadora María Dolores Martínez Madrona entenderá que están mostrando una negativa a ser seleccionadas, por lo cual correrían riesgo de sanción.
La situación entre las jugadoras de la selección de España y la Real Federación Española de Fútbol es tensa desde hace mucho tiempo, pero claramente explotó tras el beso no consentido de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, lo que provocó una infinidad de críticas al ahora ex presidente del fútbol español.
La RFEF pide un mes para avanzar en los cambios, pero necesita jugar
Según también ha precisado Onda Cero, desde la RFEF “les habrían garantizado que estarán fuera de la RFEF en un plazo de un mes como máximo”. Pero para que esto se lleve a cabo, deben levantar su denuncia y estar aptas para el partido ante Suecia del venidero viernes. ¿Habrá tregua?
