La bronca de Luis Enrique tras el empate frente a Suecia

La Selección de España empató 0 a 0 frente a Suecia en un encuentro que no tuvo grandes situaciones y donde La Roja no pudo resolver el blindaje defensivo que ofreció su rival. Si bien fue un encuentro muy cerrado, España podría haber hecho algo más de la mano de Morata, quién malogró lo poco que tuvo el equipo.

Sin embargo, Luis Enrique se mostró muy molesto con el plateo del rival, probablemente porque expone sus falencias a la hora del ataque, algo que esta afectando al equipo hace tiempo y no puede resolver ni con uno de los mejores en su puesto como probablemente lo sea Morata. Luego del encuentro, el entrenador compareció en rueda de prensa.

"No me deja sensaciones muy diferentes a la de los espectadores o los periodistas. Hemos sido superiores a un rival que ha decidido defender y defender y basarlo en generar peligro en algún balón largo. Han tenido una oportunidad, y habría sido injusto". Está convencido de lo hecho por la selección y de lo que seguirá haciendo. "Era un día bonito para una victoria, pero no dejaremos de intentarlo".

Sin embargo, Luis Enrique entiende que su equipo debe seguir por esta vía para darle la vuelta al funcionamiento: "¿Falta de gol? Es el discurso de siempre. Lo que intentamos es generar ocasiones, para eso hay que hacer las cosas bien. El campo no ayudaba mucho, si ves a tus mejores jugadores que no pueden controlar el balón... Necesitamos que el césped esté mejor, pero no es una disculpa. Hemos tenido ocasiones, pero no las hemos materializado. Con mala suerte yo he perdido partidos así".

Por otro lado, respaldó al delantero que fue protagonista porque lo insultaron desde la grada y algunas otras cosas: "He visto que a Morata le han aplaudido. Para mí es un grandísimo jugador que hace muchísimas cosas bien en ataque y defensa. No ha hecho el gol y tiene que lidiar con eso. Él está acostumbrado. Es mucho más fácil jugar con el público a favor".

Sin embago, no metió a toda la afición en la misma bolsa y sentenció: "El público ha estado soberbio, nos ha ayudado. El sábado esperamos lo mismo. Es difícil marcar a un rival que haga lo que ha hecho Suecia. Con Polonia y Eslovaquia va a ser un discurso similar", avisó el técnico asturiano.