Para fortuna del fútbol español, Luis Rubiales es historia como directivo. Mientras se preocupa por darle a la justicia las explicaciones en el marco de la imputación por “agresión sexual y coacciones” contra Jenni Hermoso, a quien le dio un beso sin su consentimiento, rompiendo cualquier tipo de límite o barrera personal de la jugadora campeona del mundo, la RFEF intenta limpiar su imagen y reordenarse de cara a futuro.
El próximo sábado habrá una reunión más que importante entre la RFEF y las dos federaciones que buscan organizar el Mundial 2030 en conjunto, Portugal y Marruecos. Sucede que, esto, con Luis Rubiales todavía como parte de la federación española se hubiese tornado más que difícil. Vale recordar que uno de los argumentos que le dieron a Rubiales para dimitir fue que su sola presencia (por más que estuviese suspendido) arremetía contra los intereses de España de organizar el Mundial.
Desde la federación marroquí destacaron que "somos conscientes de la gran responsabilidad que tenemos, ya que estamos ante una oportunidad histórica. Vamos a sumar nuestros mejores esfuerzos a un gran equipo de profesionales que están trabajando muy duro para lograr el objetivo. Es un honor para nosotros formar parte de una candidatura tan fuerte e importante al Mundial 2030".
El trío España, Portugal y Marruecos busca quedarse con la organización del Mundial 2030, pero compite contra un cuarteto sudamericano comandado por los actuales campeones del mundo, Argentina, y secundado por Uruguay, Paraguay y Chile. Sucede que en Sudamérica abogan por un Mundial en esa parte del mundo en el marco del centenario del Mundial de 1930, organizado en Uruguay.
La amenaza que recibió Luis Rubiales tras negarse a dimitir de la RFEF
Hubo una llamada que recibió Luis Rubiales, en la cual (por fin) entendió que ya no había más que hacer. Fue del propio Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, organismo del cual Luis Rubiales era vicepresidente hasta hace pocos días. En la comunicación, el ex directivo del fútbol español quedó contra las cuerdas (en realidad, ya lo estaba pero solo él no lo percibía). "O dimites o te ceso", le habría dicho Ceferin a Luis Rubiales, según publicó Marca. Historia acabada.
