Por Roberto Alonso
En la previa del encuentro de la Champions League entre el Real Madrid y el Salzburgo, los aledaños del Santiago Bernabéu fueron escenario de una tensa protesta por parte de un sector de la afición blanca. Un grupo de ultras, en su mayoría pertenecientes al histórico grupo Ultras Sur, corearon cánticos pidiendo la dimisión del presidente Florentino Pérez.
La manifestación de los ultras ha generado un ambiente enrarecido en el Santiago Bernabéu. Si bien no todos los aficionados comparten las críticas de los ultras, es evidente que existe un sector de la afición que está descontento con la gestión de Florentino Pérez.
Hasta el momento, el Real Madrid no se ha pronunciado oficialmente sobre las protestas de los ultras. Sin embargo, es de esperar que el club tome medidas para intentar calmar los ánimos y recuperar la unidad entre la afición.
Las tensiones entre la directiva y una parte de la afición del Real Madrid no son nuevas. A lo largo de la historia del club se han producido episodios similares, aunque en los últimos años estas manifestaciones de descontento se han vuelto más frecuentes.
Las protestas de los ultras pueden tener consecuencias tanto a corto como a largo plazo. A corto plazo, pueden generar un ambiente de inestabilidad en el club y afectar el rendimiento de los jugadores. A largo plazo, si la situación no se resuelve, podrían producirse divisiones más profundas entre la afición y la directiva.
La situación en el Real Madrid es compleja y requiere de una solución urgente. Tanto el club como los aficionados deben ser capaces de encontrar un punto de encuentro y trabajar juntos para lograr los objetivos deportivos.
13/02/2025
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