Por Ramiro Diaz
Barcelona dio un paso importante en la carrera por el título de La Liga. Este sábado, el equipo de Hansi Flick venció 1-0 a Leganés en un partido más trabajado que lucido, pero que terminó con final feliz para los culés. Con esta victoria, el Barça se escapó a siete puntos del Real Madrid, aunque con un partido más, y sigue en lo más alto del campeonato español.
El gol del triunfo llegó en la primera mitad, en una jugada aislada que le permitió a los blaugranas ponerse en ventaja. A partir de ahí, el equipo intentó controlar el partido con la posesión, aunque sin lograr profundidad ni volumen ofensivo. Leganés, bien parado atrás, nunca dejó de amenazar con alguna contra, especialmente en el tramo final.
Cuando el reloj marcaba los últimos minutos del encuentro, llegó la jugada que pudo haber cambiado la historia. Munir El Haddadi escapó con espacio y se encaminaba mano a mano para el 1-1, pero apareció Iñigo Martínez con un cruce monumental que salvó al Barcelona del empate.
Fue una barrida quirúrgica, limpia y precisa, que desató la euforia tanto dentro como fuera del campo. No fue un gol, pero lo celebraron como si lo fuera. Ese cierre defensivo sostuvo los tres puntos y terminó siendo tan valioso como el único tanto del encuentro.
Con este resultado, el Barcelona estira la ventaja sobre su clásico rival, que deberá ganar su próximo partido para no perder terreno en la pelea por el campeonato. Si bien el rendimiento colectivo todavía deja dudas, los de Flick siguen sumando victorias y mantienen el liderazgo con firmeza.
El cierre de torneo se avecina y el margen se empieza a reducir. Cada punto cuenta, y más aún, cada cruce como el de Iñigo Martínez, que esta noche valió casi como una vuelta olímpica anticipada.
15/04/2025
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