(VIDEO) Así festejó Kylian Mbappé la obra de arte de Federico Valverde ante Bilbao

Kylian Mbappé no estuvo en el campo, pero vibró como un aficionado más. Desde la grada, el crack francés vivió con intensidad el triunfo del Real Madrid, y su reacción tras el golazo de Federico Valverde fue una muestra perfecta del espíritu que reina en el vestuario merengue. Aunque no pudo jugar por una combinación de sanción y molestias físicas, Mbappé dejó en claro que su conexión con el equipo va mucho más allá de los minutos en cancha.

El uruguayo apareció cuando más se lo necesitaba. Con un derechazo brutal desde fuera del área, Valverde se transformó en el héroe del partido, desatando la locura en el estadio y manteniendo viva la ilusión blanca por conquistar La Liga. Fue un tanto de otra galaxia, digno de una noche grande, y que encontró en Mbappé a uno de sus principales admiradores.

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Las cámaras captaron a Kylian celebrando con euforia, levantándose de su asiento y sonriendo de oreja a oreja. En ese instante, no fue la figura mediática, ni el fichaje estelar: fue un madridista más, dejando fluir toda su alegría por un gol que vale oro. Su reacción fue rápidamente compartida en redes sociales y celebrada por los hinchas, que valoran esa implicación del delantero incluso cuando no está en el campo.

Federico Valverde, apodado “El Halcón”, volvió a demostrar por qué es uno de los motores del equipo. Su despliegue físico, su entrega y su capacidad para aparecer en momentos clave lo han convertido en un ídolo silencioso del madridismo. Esta vez, con un gol para enmarcar, elevó su figura a la de héroe absoluto, ganándose una ovación que retumbó en todo el estadio.

La complicidad entre Mbappé y sus compañeros se nota en cada gesto. El francés ha encontrado su lugar en un grupo que combina talento, compromiso y ambición. Y ese festejo tras el tanto de Valverde fue la muestra más pura de lo que vive el vestuario: unión, ganas y un objetivo común.

Con esta victoria, el Real Madrid sigue firme en la pelea por La Liga. Los partidos se acortan, los puntos se vuelven oro y cada detalle cuenta. Y si bien Mbappé no estuvo sobre el césped, su presencia fue vital desde lo emocional. Porque a veces, la pasión se contagia también desde la grada.

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El Halcón fue el héroe, pero el festejo de Mbappé mostró que este Madrid late al mismo ritmo: el de la gloria.