Por Renato Perez
La disciplina es un pilar fundamental en cualquier equipo de alto rendimiento, y los entrenadores suelen implementar diversas estrategias para mantenerla. En el caso del FC Barcelona, dos técnicos de renombre, Xavi Hernández y Hansi Flick, han adoptado enfoques contrastantes para gestionar los posibles retrasos de sus jugadores.
Según las revelaciones de Pedri en una entrevista para el diario Sport, durante la etapa de Xavi Hernández al frente del equipo, se establecieron multas económicas para los jugadores que llegaban tarde a los entrenamientos. La sanción consistía en pagar 1.000 euros por cada minuto de retraso, una cantidad que se duplicaba por cada minuto adicional. Esta medida, aunque severa, tenía como objetivo generar un impacto económico directo en los jugadores y fomentar la puntualidad.
Sin embargo, con la llegada de Hansi Flick al banquillo culé, la dinámica ha cambiado radicalmente. El entrenador alemán ha optado por una estrategia más directa y contundente: los jugadores que llegan tarde no son considerados para el siguiente partido, ya sea como titulares o incluso para formar parte de la convocatoria. Esta medida, aunque puede parecer más drástica, busca transmitir un mensaje claro: la puntualidad es un aspecto no negociable y las consecuencias de incumplirla son inmediatas y visibles.
Ambos métodos tienen sus ventajas y desventajas. Las multas económicas pueden ser un buen disuasivo, pero no siempre garantizan un cambio de actitud a largo plazo. Algunos jugadores pueden estar dispuestos a pagar la multa con tal de llegar tarde ocasionalmente. Por otro lado, la sanción deportiva de no jugar puede ser más efectiva para aquellos jugadores que valoran por encima de todo su lugar en el equipo.
Es importante destacar que la elección del método disciplinario depende de diversos factores, como la personalidad de los jugadores, la cultura del club y el estilo de juego del entrenador. Lo que funciona para un equipo puede no funcionar para otro.
Tanto Xavi Hernández como Hansi Flick han demostrado ser entrenadores exitosos, cada uno con su propia filosofía y métodos de trabajo. La elección de uno u otro enfoque disciplinario depende de las características de cada equipo y de los objetivos que se persiguen. Lo importante es que se establezcan reglas claras y que se cumplan de manera rigurosa.
En última instancia, la disciplina es fundamental para el éxito de cualquier equipo. Al fomentar la puntualidad y el respeto por las normas, los entrenadores contribuyen a crear un ambiente de trabajo sano y productivo.
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024
06/12/2024