Por Roberto Alonso

La noticia de la ausencia de Kylian Mbappé y Fede Valverde en la convocatoria del Real Madrid para las semifinales de la Copa del Rey contra la Real Sociedad en San Sebastián generó sorpresa y debate entre los aficionados. Sin embargo, detrás de esta decisión aparentemente inesperada, se esconde una lógica aplastante: la gestión inteligente de la plantilla ante un calendario exigente.
Carlo Ancelotti, consciente de la importancia de dosificar los esfuerzos de sus jugadores clave, optó por dar descanso a Mbappé y Valverde. La razón principal radica en la acumulación de partidos en un corto período de tiempo. El Real Madrid se enfrenta a un desafío mayúsculo: tres partidos cruciales en apenas siete días.
Tras el enfrentamiento contra la Real Sociedad, el equipo blanco deberá viajar a Sevilla para medirse al Betis en un duelo crucial por La Liga. Apenas tres días después, el Santiago Bernabéu se vestirá de gala para recibir al Atlético de Madrid en el partido de ida de los octavos de final de la Champions League. Dos partidos de máxima exigencia que requieren la mejor versión de los jugadores.
En este contexto, la decisión de Ancelotti se revela como una medida preventiva para evitar el desgaste físico y el riesgo de lesiones de dos jugadores fundamentales. Mbappé y Valverde, pilares del esquema táctico del Real Madrid, necesitan llegar en óptimas condiciones a los partidos contra el Betis y el Atlético de Madrid.
La ausencia de Mbappé, máximo goleador del equipo, y de Valverde, motor del centro del campo, supone un golpe duro para el Real Madrid. Sin embargo, Ancelotti confía en la profundidad de su plantilla y en la capacidad de otros jugadores para asumir el protagonismo.
La Copa del Rey, si bien es un título importante, queda relegada a un segundo plano ante la prioridad de La Liga y la Champions League. El Real Madrid aspira a conquistar ambos títulos, y para ello necesita contar con sus mejores jugadores en plenitud de facultades.
La gestión de la plantilla es un aspecto clave en el fútbol moderno. Los entrenadores deben encontrar el equilibrio entre la exigencia de los resultados y la necesidad de preservar la salud de sus jugadores. Ancelotti, con su experiencia y sabiduría, ha demostrado ser un maestro en este arte.
La ausencia de Mbappé y Valverde en la Copa del Rey no es un síntoma de debilidad, sino una muestra de inteligencia y previsión. El Real Madrid apuesta por una estrategia a largo plazo, consciente de que los títulos se conquistan con una plantilla sana y motivada.
En definitiva, la decisión de Ancelotti es un ejemplo de cómo la gestión inteligente de la plantilla puede marcar la diferencia en la consecución de los objetivos. El Real Madrid, con su mirada puesta en La Liga y la Champions League, no está dispuesto a correr riesgos innecesarios.

13/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

12/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025

11/05/2025