Por Ramiro Diaz

El Real Madrid se enfrentó a la Real Sociedad en las semifinales de la Copa del Rey en un partido lleno de tensión y polémica. Sin embargo, lo que más indignó a los hinchas blancos fue una jugada que pudo haber cambiado el rumbo del encuentro: un claro penalti sobre Jude Bellingham que el árbitro decidió ignorar.
La acción ocurrió en el área de la Real Sociedad, cuando el arquero Álex Remiro salió a cortar un centro y, en su intento de despejar, golpeó con el brazo en el rostro a Bellingham. El inglés cayó al suelo visiblemente afectado, mientras los jugadores del Real Madrid reclamaban airadamente la infracción. Para sorpresa de todos, el árbitro dejó seguir la jugada y desde el VAR no lo llamaron para revisar la acción.
Las repeticiones de la televisión dejaron en evidencia el golpe de Remiro sobre Bellingham. En cualquier otra circunstancia, una acción de este tipo hubiera sido sancionada como penalti, ya que el arquero impactó directamente en la cara del jugador sin tocar el balón. No obstante, la decisión arbitral generó un enorme malestar en el equipo de Carlo Ancelotti y en la afición merengue.
En las redes sociales, los hinchas del Real Madrid explotaron contra el arbitraje, acusando al colegiado de "robo" y denunciando una presunta falta de criterio en las decisiones. Muchos compararon esta jugada con otras en las que sí se han sancionado penaltis similares, lo que alimentó aún más la indignación.
Este nuevo episodio vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre el uso del VAR y la interpretación de los árbitros en jugadas decisivas. Mientras el Real Madrid se siente perjudicado, la Real Sociedad se benefició de una polémica que seguramente seguirá dando de qué hablar en los próximos días.

13/05/2025

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