Por Renato Perez

El enfrentamiento entre Benfica y Barcelona en la ida de los octavos de final de la Champions League se ha visto marcado por una polémica decisión arbitral que ha generado una oleada de reacciones, particularmente de los hinchas del Real Madrid. La expulsión del defensor del Barcelona, Pau Cubarsí, por una falta sobre un rival en el primer tiempo, ha sido vista como una "roja escandalosa" por muchos seguidores del Madrid, que no dudaron en manifestar su burla a través de las redes sociales.
"ROJA ESCANDALOSA A CUBARSÍ, ESTO ES EUROPA, NO LA LIGA NEGREIRA", exclamaron algunos madridistas en Twitter. Este tipo de comentarios alude a la controversia que rodea la Liga Española en los últimos años, especialmente en relación con las acusaciones de corrupción en torno al supuesto pago de comisiones al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros de España, José María Enríquez Negreira.
"En LaLiga estoy seguro de que no pitan ni falta", comentó otro aficionado, sugiriendo que, si la jugada hubiera ocurrido en un partido de LaLiga, el árbitro probablemente no habría tomado una decisión tan severa, lo que para muchos recalca el nivel de diferencia percibido entre los arbitrajes nacionales e internacionales.
La jugada que desencadenó la tarjeta roja ocurrió tras un choque que el árbitro consideró como una acción violenta de Cubarsí, quien, al intentar interceptar un pase largo, impactó a su oponente con el pie en una jugada que muchos consideraron accidental o, como mínimo, no lo suficientemente grave para una expulsión. El árbitro, después de revisar la jugada, determinó que era una infracción merecedora de roja directa, lo que dejó al Barcelona con 10 hombres a la mitad del primer tiempo.
Para los seguidores del Real Madrid, la expulsión de Cubarsí ha sido un tema de controversia. Los comentarios en las redes sociales no tardaron en hacerse notar, y muchos hinchas merengues hicieron referencia a lo que consideran una desproporcionada interpretación de la jugada, sugiriendo que en otros contextos, como la LaLiga, esta falta probablemente no habría sido sancionada con una tarjeta roja.
A pesar de las críticas hacia el árbitro, los madridistas también han sido claros en su apoyo a la Champions League como un torneo en el que, según ellos, las decisiones arbitrales son más justas y menos propensas a influencias externas. Muchos vieron esta jugada como una llamada de atención sobre cómo se gestionan las sanciones en competiciones más relevantes a nivel europeo.
Fuente: X


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