Una queja por el desplante a la afición pone en riesgo al Barcelona

En vistas de su compromiso por la Fecha 20 de La Liga Santander, el Barcelona recibió una queja formal que lo pondría en peligro. Cuando Xavi Hernández tenía casi todo listo para enfrentar al Sevilla, su próximo rival, los directivos del conjunto dirigido por Jorge Sampaoli presentaron una queja formal a los blaugranas, que podría modificar los planes en la previa del encuentro.

El conflicto surgió a partir de la decisión del Barcelona de no permitir la venta de entradas a aficionados del Sevilla, así como tampoco permitirá el ingreso de ninguna persona que portase algún emblema o símbolo del conjunto rival al estadio. Debido a esto, los sevillistas decidieron tomar cartas en el asunto y elevar una protesta no solo al conjunto catalán, sino también a La Liga.

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“El club no entiende proporcionado el mensaje ni ajustado a la normativa, aun cuando el partido se haya declarado de alto riesgo, que un aficionado del Sevilla Fútbol Club no pueda acceder al estadio portando o vistiendo una camiseta o bufanda de su equipo”, esboza el comunicado del Sevilla, que espera que el conjunto ‘Culé’ retroceda en la medida. 

Los antecedentes del Barcelona

Esta no es la primera vez que el Barcelona toma esta medida, y la justifica a partir de razones de seguridad. En los encuentros frente a la Real Sociedad y el RDC Espanyol, el conjunto ‘Culé’ tampoco permitió el ingreso al estadio de los aficionados visitantes. Si bien el caso de los blanquiazules no pasó a mayores, todo lo contrario sucedió con el combinado perico. Mediante sus redes sociales, el Espanyol informó, en aquel momento, que tomaría la misma medida en el encuentro de vuelta que se jugará en Mayo.