Por Tomás Valle

El Barcelona derrotó al Villarreal por 4-3 y volvió a llevarse los tres puntos en el Estadio de la Cerámica. A Xavi Hernández se lo vio preocupado desde el palco por el rendimiento defensivo que presentó su equipo a pesar de la victoria, ya que tuvo muchos errores que hicieron sufrir por demás a los fanáticos culés.
Más allá de lo defensivo, al Barça también le costó finalizar las jugadas en ataque, ya que Robert Lewandowski y Ansu Fati tuvieron varias oportunidades para seguir aumentando el marcador. De hecho, hubo una queja por parte del ‘10’ azulgrana debido a que no le dio el balón en una de las últimas jugadas.
Resulta que el delantero polaco estaba frente al portero Filip Jorgensen sin ninguna marca, lo mismo que Ansu Fati que le solicitó el balón al ‘9’ del Barça. Sin embargo, el polaco quiso hacer la suya y remató ante la salida del sueco. El mismo fue tapado por el sueco y el canterano culé se fastidió por no habérsela dado.
El delantero polaco está en uno de sus peores momentos en cuanto al nivel futbolístico desde que llegó al Barça. No logró marcar en las primeras dos jornadas, aunque sí rompió la mala racha contra el Villarreal al empujarla debajo del arco. Más allá del gol, no tuvo una buena tarde y los fanáticos se mostraron más que disconformes por su rendimiento.

13/05/2025

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