Por Tomás Valle

El atacante Joao Félix parece empezar a volver a ser el que Diego Simeone fue a buscar a Benfica. El luso ha levantado su nivel en los últimos encuentros, y ahora se reconcilió con el gol. Desde aquel lejano 28 de febrero en la jornada ante el Villarreal, que el internacional portugués no anotaba vestido de rojiblanco hasta su diana contra el Betis. Aportó para la contundente victoria del último campeón de LaLiga ante el equipo verdiblanco, por 3-0 (Carrasco y Pezella en propia puerta, los otros dos goles).
Joao Félix es tercer fichaje más alto de la historia de este deporte y el primero del Atlético Madrid. Para asegurarse al portugués, Atleti debió abonar los 120 millones de euros de la cláusula de rescisión del futbolista luso. A eso, hubo que adicionarle 7,2 millones. De los cuales 6 corresponden a los coste financieros de aplazar los pagos y 1,2 son en concepto al pago del mecanismo de solidaridad, que le corresponden al FC Porto.
Jorge Mendes, representante de Joao Félix, también se hizo acreedor a una gran suma de dinero de esa transacción. El portugués recibió 12 millones de euros por la venta más cara de la historia del Benfica. Mientras que el futbolista colchonero, había firmado un vínculo por 7 años, con ingresos del orden de los 7 millones de euros por temporada.
Desde su llegada a España, Joao Félix está en deuda en el Colchonero. Ha disputado 63 partidos por LaLiga. En ellos marcó tan solo 14 goles. Por UEFA Champions League, el internacional portugués participó en 17 encuentros, en los que marcó 6 anotaciones. Por Copa del Rey y Supercopa de España, el futbolista luso participó de 4 encuentros, en los cuales no anotó en ninguno de ellos.

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