Luis Rubiales atraviesa una de las etapas más complicadas de su vida. La polémica inició en los festejos de España tras la obtención del Mundial Femenino de este año en Nueva Zelanda y Australia, momento en el que el ex mandatario de la RFEF decidió besar a la futbolista de la Roja, Jenni Hermoso. Desde entonces hubo cruces de palabras, amenazas, idas y vueltas, pero lo cierto es que el dirigente terminó renunciando a su cargo como presidente de la entidad que regula el fútbol español.
Pero la historia no terminó allí para Luis Rubiales, ya que el hombre fue acusado de agresión sexual y coacciones por su acción con la futbolista del Pachuca y el proceso legal continúa su marcha, provocando un dolor de cabeza muy grande para el ex jugador de fútbol. Sin embargo, uno de los temas que más ha llamado la atención en las últimas horas ha sido la determinación que tomó la FIFA al respecto de quien fuera Presidente de la Real Federación Española de Fúbol durante cinco años. Es que el ente madre del fútbol tomó una dura medida a través de su Comisión Disciplinaria.
Según el comunicado oficial, la FIFA suspendió por tres años a Luis Rubiales para toda actividad relacionada con el fútbol. El objetivo será mantener al ex dirigente lo más alejado de la disciplina y que el juicio avance sin interrupciones. De hecho, el texto que lanzó la Federación Internacional de Fútbol Asociación reza: "El señor Rubiales ha sido notificado de los términos de la decisión de la Comisión Disciplinaria de la FIFA de hoy. De conformidad con las disposiciones pertinentes del Código Disciplinario de la FIFA, dispone de diez días para solicitar una decisión motivada que, en caso de ser solicitada, se publicará posteriormente en legal.fifa.com. La decisión sigue sujeta a una posible apelación ante la Comisión de Apelación de la FIFA".
¿Cómo sigue el caso de Luis Rubiales?
De esta forma, Luis Rubiales no tendrá opciones de presentarse nuevamente a las elecciones de la RFEF, las cuales se celebrarán en el primer trimestre de 2024. Por haber ingresado a juicio y tener que renunciar a su cargo, el nacido en Las Palmas de Gran Canaria dejó de tener su ingreso como presidente, el cual rondaba por los 675.000 euros brutos. Además, como era uno de los seis vicepresidentes de la UEFA recibía otros 250.000 euros extra, los cuales ha dejado de percibir.
