Por Tomás Valle

Después de la durísima sanción que le habían impuesto a Lionel Messi de los dos partidos por haber viajado a Arabia Saudí y ausentarse a un entrenamiento, el argentino volvió a vestir la camiseta del París Saint-Germain este sábado. Los dirigidos por Christophe Galtier golearon al Ajaccio por 5-0 en el Parque de los Príncipes.
Lo más sorprendente de la tarde fue el odio generalizado de los fanáticos del PSG contra el rosarino. Cada vez que tocaba la pelota, los franceses se encargaron de llenarlo de silbidos, algo único en el mundo contra un futbolista como Messi. Por eso, el argentino ya tiene asegurado que se irá cuando finalice la temporada.
Finalmente, el argentino solo tuvo un partido de sanción de los dos que le habían prohibido. El entrenador francés decidió colocarlo y disputó un gran encuentro a pesar de todas las críticas y pitadas que se llevó. Leo trató de evitar eso, pero le fue inevitable. Uno de sus mejores amigos, Neymar, decidió apoyarlo desde su palco.
Mientras Messi estaba disputando su partido con la camiseta parisina, el brasileño ex Barça sacó su celular y realizó una videollamada. Llamó ni más ni menos que a Luis Suárez, lo que provocó la nostalgia de los culés. Ambos estaban en comunicación al mismo tiempo que miraban al rosarino. Ney sacó una foto de su videollamada y la subió a su cuenta de Instagrama para apoyar a Messi.

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