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El nuevo guía catalán, Pedri condenado entre las lesiones y su destino con el FC Barcelona

El niño maravilla centrocampista simplemente no puede mantenerse en forma y Xavi podría tener que afrontar un futuro diferente.

Por Tomás Valle

El niño maravilla centrocampista simplemente no puede mantenerse en forma y Xavi podría tener que afrontar un futuro diferente.
El niño maravilla centrocampista simplemente no puede mantenerse en forma y Xavi podría tener que afrontar un futuro diferente.
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A principios de esta semana, se supo que Pedri podría jugar unos minutos en el choque de semifinales de la Supercopa de España entre el Barcelona y Osasuna. Esta fue, objetivamente, una buena noticia para el Barça. Después de todo, los blaugrana en apuros ciertamente han extrañado a uno de sus mejores jugadores durante su reciente racha complicada.

No se puede escapar que Pedri es un jugador vital para este equipo azulgrana. En las últimas dos temporadas y media, el Barça sólo ha perdido tres partidos de Liga en los que ha jugado Pedri. Cuando no está en el campo, no sólo se vuelven más susceptibles a perder, sino que la cualidad que le falta es fácil de ver.

El verdadero problema, sin embargo, es que Pedri no está lo suficiente en el campo. Ha jugado sólo 46 partidos de La Liga desde el inicio de la campaña 2021-22, y 67 en todas las competiciones. Un adolescente que se ha acostumbrado demasiado, demasiado pronto, ha demostrado ser incapaz de soportar la inmensa carga de trabajo que se le impone.

Se ha convertido en un ciclo desafortunado y aparentemente inquebrantable; el Golden Boy convertido en mediocampista ve su potencial limitado por su incapacidad para mantenerse en forma. Los problemas de lesiones crónicas no son nuevos en el fútbol, pero para Pedri, un mediocampista de acción que depende de cada tendón de los músculos que actualmente lo debilitan, podría ser la muerte de una carrera que prometía tanto.

Un futuro prometedor

Pedri no es un graduado de La Masia (llegó de Las Palmas en 2020), pero su estilo de juego y la facilidad con la que se convirtió en una estrella del primer equipo cuando solo tenía 18 años significa que durante mucho tiempo ha sido citado como parte de la última ola de canteranos blaugrana. talento. Llegó a Cataluña en un momento extraño. El Barça estaba en el final de una era en septiembre de 2020, cuando los mejores días de Lionel Messi parecían haber quedado en el espejo retrovisor, mientras que una serie de fichajes de grandes cantidades de dinero en áreas de ataque no estaban dando resultado.


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