Por Tomás Valle

La aparición de Lamine Yamal en el primer equipo del FC Barcelona ha sido una de las grandes sorpresas de la temporada. El canterano, a sus 16 años, se convirtió en el jugador más joven en debutar con la elástica Blaugrana como así también el más precoz en anotar un tanto en LaLiga y Champions League. El nacido en Esplugues de Llobregrat tiene un enorme futuro por delante y en lo que va del curso ya ha demostrado sus enormes cualidades, las cuales llevaron a que los Culés lo blinden con una cláusula de salida de mil millones de euros. Sin embargo, Xavi y el cuerpo técnico vienen siguiendo de cerca a un chico que podría seguir los pasos del delantero y convertirse en la nueva perla de la plantilla.
Se trata de Leo Saca, un central nacido en Moldavia que viene dando mucho que hablar en el Juvenil B del Barça y que el pasado fin de semana fue elegido como MVP del choque en el que su equipo venció por 2-0 al Sant Andreu en condición de visitante. El diario Sport afirma que el defensa tiene una gran interpretación de juego, buenas condiciones a la hora de la salida con el balón en los pies y pases precisos a los mediocampistas en situación de ventaja. Sumado a ello, ejerce una presión rápida y asfixiante, en tanto que también se muestra sumamente concentrado e involucrado con las tareas que le solicita su entrenador.
Leo Saca forma parte del Sub-21 de Moldavia y ya empieza a ser visto con buenos ojos por Xavi y compañía, pero detrás de esa figura que empieza a asomar hay una historia detrás. La familia de Saca se trasladó a España en el verano de 2016 cuando el chico aún tenía 9 años (hoy 16). De hecho, el zaguero formaba parte del Zimbru Chisinau, uno de los equipos más importantes de su país de origen. Al poco tiempo, el joven quiso cumplir su sueño de jugar en el FC Barcelona y pasó las pruebas de acceso a la Barça Escola, aunque tiempo después tuvo su paso por el Damm FC y el Espanyol, quienes apostaron por él y lo hicieron crecer futbolísticamente.
Su nivel en Espanyol fue superlativo y el FC Barcelona se decidió a adquirirlo en el verano de 2020 y desde entonces Leo Saca no ha parado de crecer. Ante las constantes lesiones de los jugadores del primer equipo, no hay que descartar que Saca pueda llegar a tener sus primeros minutos como profesional en la primera mitad de 2024.

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